Arquitectura sostenible

Qué es arquitectura sostenible?

En 1987 se definió por primera vez el desarrollo sostenible en el Informe Brundlant, realizado por la primera ministra noruega Gro Harlem Brundtland, fruto de la Comisión Mundial de Medio Ambiente y Desarrollo de Naciones Unidas.

El desarrollo sostenible es aquel que satisface las necesidades del presente sin comprometer las necesidades de las futuras generaciones.

Es necesario un equilibrio entre el bienestar social, la viabilidad económica y el respeto por el medioambiente.

Aplicando este concepto en los edificios, la arquitectura sostenible (o sustentable) es aquella respetuosa con el medio ambiente al elegir las soluciones con menor impacto en él, siendo viables económicamente y equitativas para la sociedad.

Por qué es tan importante que seamos respetuosos con el medioambiente?

Las acciones de la especie humana están modificando nuestro entorno irreversiblemente. Nos consideramos el centro del planeta, sirviéndonos de todos sus recursos (egocentrismo), en vez de considerarnos una parte más, que no puede vivir sin el resto. Nuestras acciones están afectando a todos los medios:

  • Aire: contaminación, efecto invernadero, cambio climático…
  • Agua: contaminación, deshielo de los polos, explotación de los acuíferos…
  • Tierra: contaminación, desertización…

Se están reduciendo los hábitats naturales afectando gravemente a la diversidad de las especies, estando muchas de ellas en peligro de extinción.

Qué puede hacer la arquitectura para mejorar esta situación?

En los edificios pasamos entre un 80 y un 90% de nuestro tiempo, y requerimos estar en confort. Los arquitectos e ingenieros deben optimizar el diseño de los edificios para conseguir que el impacto del edificio en el medio ambiente sea el menor posible (análisis del ciclo de vida del edificio: impacto ambiental durante el diseño, construcción, uso y demolición). Se deben analizar múltiples vectores:

  • Materiales: menor consumo posible de materiales de construcción, priorizando los reutilizados, reciclados y/o producidos cerca del edificio (menor gasto de energía en su transporte).
  • Energía: con medidas de eficiencia energética (mejor aislamiento e instalaciones más eficientes) e instalando energías renovables, disminuye el consumo de energías fósiles para conseguir el confort de los usuarios.
  • Agua: estrategias de reducción del consumo (doble pulsador en inodoro, aireadores en los grifos…) y reutilización (agua de lluvia para riego, o para las cisternas de los inodoro…) permiten reducir el consumo de agua, este bien tan escaso.
  • Residuos: una buena gestión en la obra permite reciclar los materiales residuales.

Una estrategia importante es rehabilitar energéticamente los edificios, mejorando su aislamiento térmico y sus instalaciones. Se disminuye la necesidad de energía (demanda) para que los usuarios estén en confort, aprovechando la estructura del edificio existente (reutilización de los materiales).

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